La Casa del Mayorazgo de la Canal ubicada en el centro de la ciudad de San Miguel de Allende es uno de los mejores ejemplos de arquitectura civil novohispana en el Bajío. Edificada hacia finales del siglo XVIII o principios del XIX por encargo de don Manuel Tomás de la Canal y su hijo José Mariano, la casa es de estilo arquitectónico barroco, familiarizado con la tradición italiana y francesa de los siglos XVI y XVIII, combinada con la herencia local.
Además de ser una joya arquitectónica, el palacio ha sido testigos de importantes sucesos políticos y sociales.
Previo a la Independencia de México, el mayorazgo don Narciso María Loreto de la Canal, se había relacionado con don Ignacio Allende, los Aldama y otros criollos conspiradores, uniéndose a la causa libertadora. A fines de diciembre de 1808 organizaron una Junta Secreta que llegó a reunir más de sesenta conspiradores de ideología criollista, quienes en ocasiones se reunían en el palacio Canal.
Al abandonar los insurgentes la población de San Miguel en 1810, la villa fue ocupada por las fuerzas realistas. Fue entonces cuando la mansión de la familia Canal fue saqueada y prácticamente destrozada. Después de la muerte de don Narciso y su esposa, sus bienes, incluso el palacio familiar de los Canal, fueron confiscados. En el siglo XIX la mansión fue transformada en hotel y después en el siglo XX, la mansión pasó de nueva cuenta a manos de particulares, en este caso a la familia de don Albino García. En 1981, esta familia vendió al Banco Nacional de México el inmueble.
La restauración se llevó a cabo en dos periodos: 1981–1985 y 1997–1998. Después de un laborioso proceso de rehabilitación, adecuación, limpieza y restauración de los espacios correspondientes al patio principal, el Banco Nacional de México, a través de Fomento Cultural Citibanamex, abrió en 2011 las puertas de la Casa del Mayorazgo de la Canal para que opere como Casa Señorial del Banco Nacional de México.